marzo 30, 2010

Delfines y Seres humanos: Un destino en común

Delfines y seres humanos tienen mucho en común. Nuestros hermanos delfines nos sorprenden nuevamente. Distintas investigaciones científicas han confirmado que la composición genética del ADN de los delfines es sorprendentemente similar a los seres humanos. Los delfines están más cerca de nosotros como mamíferos que las vacas, caballos o cerdos, a pesar del hecho de vivir en el agua.


"Los delfines son mamíferos marinos que nadan en el océano y fue sorprendente saber que los seres humanos teníamos más en común con los delfines que con los mamíferos terrestres", explica Horst Hameister, profesor de génetica de la Universidad de Ulm, Alemania.

En los análisis se identificaron 36 segmentos comúnes entre el génoma de los seres humanos y los delfines (13 de los 22 cromosomas de los delfines son iguales que los cromosomas del ADN de los seres humanos, los nueve cromosomas restantes fueron reordenados. "La medida de la similitud genética fue una verdadera sorpresa para nosotros " dice David Busbee de la Universidad de Texas A & M.**

Las similitudes entre delfines y los seres humanos sugiere evaluar seriamente las teorías de un posible origen en común.

La estructura del esqueleto de los cetáceos muestra vestigios de los dedos del pie y espolones. Según las teorías de los científicos éstos evolucionaron hasta convertirse en poderosas aletas y colas, lo que indica que delfines y ballenas alguna vez vivieron en la tierra y es posible que los delfines, seres humanos y los simios puedan haber evolucionado de un ancestro común hace millones de años.
Existe una teoría que postula que es posible que todos los mamíferos sin pelo tengan un origen acuático. Cuanto más tiempo un animal ha estado en el agua es mayor la pérdida del cabello. Los delfines poseen todavía pocos pelos alrededor de su hocico.

La posición sexual más frecuente entre los seres humanos es cara a cara, la única posición de cópula de los delfines es cara a cara. Los delfines como los seres humanos tienen una sexualidad abocada al placer, no está limitada sólo a la reproducción.

Hay una capa de tejido graso debajo de la piel en los seres humanos que nos hace diferentes a los simios, porque éstos no poseen esa capa de grasa. Esta capa o tejido graso se encuentra en los delfines y todos los mamíferos marinos al igual que en los bebés de los seres humanos otorgándoles la cualidad de flotabilidad natural.

Clases especiales de lípidos, conocidos como los ácidos grasos esenciales para el tejido cerebral como el omega 6 y omega 3 se utilizan en el cerebro de los seres humanos en un equilibrio de 1:1 esta misma proporción sólo es compartida con los delfines.

Aunque la mayoría de los simios tienen miedo al agua, a los seres humanos les atrae el agua y nadar por placer. Los bebés de los seres humanos pueden nadar incluso antes de aprender a caminar.
Cuando estamos bajo el agua nuestra frecuencia cardíaca inmediatamente se ralentiza, reflejo natural en los mamíferos marinos como los delfines y también las ballenas.

En los seres humanos, el nacimiento es doloroso y con frecuencia difícil, porque la cabeza del niño y sus hombros son de mayor tamaño que el suelo de la pelvis de la madre, por lo que es necesario para el bebé avanzar por el canal del parto en un movimiento en espiral para salir, al igual que los bebés de los delfines.

Otro rasgo común compartido entre los seres humanos, los delfines y ballenas es que tienen una gran corteza cerebral y el neocórtex más amplio y un comportamiento más rico y complejo en comparación con la mayoría de los mamíferos.

Los delfines son increíblemente inteligentes poseen memoria y son capaces de resolver situaciones inesperadas. Sienten y expresan emociones, adoran las caricias porque su sentido del tacto está muy desarrollado.

Además de poseer un alto grado de conciencia, no sólo pueden reconocer a otros, sino que también pueden reconocerse a sí mismos. Sin embargo, los científicos creen que es probable que los delfines posean una inteligencia que va más allá de nuestra capacidad de medición y es posible que su inteligencia sea mayor y muy diferente a la nuestra.

Por ejemplo, en el interior del cerebro de los delfines existe una cámara que desconcierta a los investigadores, los estudios que han realizado a esta zona del cerebro de los delfines sugieren que podría servir para alcanzar estados de meditación, contemplación o pensamiento abstracto. Otros creen que esta cámara, además les proporciona la capacidad de comunicación telepática y visualización holográfica, con la cual transmitirían un código cetáceo, un tipo de comunicación energética.

La lista continua, tal vez ha llegado el momento de encontrar la relación existente entre estos descubrimientos científicos y los antecedentes que han sido considerados como parte de una mitología histórica o simplemente como conocimiento transmitido a través de las generaciones.

Famoso es el Oráculo de Delfos, el oráculo sagrado de la antigua Grecia; en la mitología de la cosmovisión sumeria se menciona a Oannes, un ser anfibio, semidios mitad pez, mitad humano. Los Dogon pueblo de la república de Malí en África occidental denominan Nommos a seres ancestrales conocidos como los "Maestros del Agua" y también los describen como seres con forma de pez.

En algunas tribus ancestrales de Hawai, Australia y Nueva Zelanda, atribuyen y reconocen poderes curativos a los delfines. Según sus antepasados los delfines son grandes sanadores que poseen la capacidad de aumentar y transformar las frecuencias energéticas de los seres humanos. Opinión que también comparte el obstetra Michel Odent:
No hay duda sobre que el ultrasonido emitido por los delfines tiene efectos biológicos en nosotros
Una opinión similar tiene un equipo de investigación del Instituto Sirius en Puna, Hawai:
Más allá del diseño de la vida, el ADN juega un poderoso papel en las recientes comunicaciones descubiertas entre los delfines y humanos.
Simplemente es sorprendente descubrir que los seres humanos estamos íntimamente relacionados con los delfines. Personas que han tenido experiencias con delfines manifiestan que no es necesario estar en su presencia física para ser tocado por las vibraciones que ellos emiten.
Son altamente evolucionados, omnidimensionales, son seres que viven en la Unidad. Ellos están aquí para ayudarnos, nos apoyan y nos guian en nuestro recuerdo ancestral de la plenitud radiante inherente de la vida y de la naturaleza. Ellos viven el ahora y su amor por la humanidad es profunda
"Si podemos demostrar que los seres humanos son similares a los delfines, y todo lo que pone en peligro a los delfines es también una preocupación para los seres humanos, puede ser más fácil persuadir a los gobiernos para convertirse en serio a la lucha contra la contaminación industrial y el mantenimiento de océanos limpios", David Busbee de la Universidad de Texas A & M.
Genética de los delfines y el hombre: http://rlknuth.iweb.bsu.edu/ "Descubriendo el genoma del delfín".
**http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/9691170 "Homologies between human and dolphin chromosomes detected by heterologous chromosome painting, Bielec PE, Gallagher DS, Womack JE, Busbee DL. Cytogenet Cell Genet. 1998;81(1):18-25.
Fuentes de consulta: Marenostrum.com, Discovery Channel Online News, Seema Kumar. Awakening Healing. Imagen del desarrollo uterino de un delfín filmado por National Geographic. Publicado en Destacado by Sailor